"Retratos de la cultura estadounidense actual:
Cine – Charlie Kaufman"

(December 2009)

Escribir un guión sobre un guionista con tu propio nombre tratando a su vez de escribir un guión de quien tiene un hermano gemelo que también escribe guiones.

Nacido en 1958 en la ciudad de Nueva York, Charlie Kaufman es el tipo que crea mundos ultrarreflexivos y complicados como el descrito arriba. Es director y escritor. Se estrenó la primera película que dirigió en 2008, “Synechdoche, New York”.

Escribió los guiones para unas de las películas más destacadas de los últimos años, incluyendo los de “¿Quieres ser John Malkovich?” (2000), “El ladrón de orquídeas” (2002), y “Eterno resplandor de un mente sin recuerdos” (2004). Ha estado nominado para tres premios Oscars y ha ganado una vez por mejor guión.

Sus historias mezclan la fantasía con la vida cotidiana para crear situaciones absurdas, trágicas, y lindas.

El protagonista de “Synechdoche, New York” es un director de teatro que crea una obra que refleja los detalles de su propia vida, hasta de sí mismo (recreando la misma miniobra de teatro). El director deja su vida original para seguir estar siempre dirigiendo la creación de este otro mundo en un almacén enorme.

En “Eterno resplandor de un mente sin recuerdos”, un hombre quiere olvidar los recuerdos de su ex-novia. Va a una empresa que tiene una tecnología para borrar las memorias específicas. El hombre comienza un viaje surrealista por los recuerdos más íntimos de su vida. Y parece que, aunque se puedan borrar los recuerdos, no significa que los deseos se puedan ir también.

Kaufman fue desconocido por muchos años. Trabajó escribiendo para televisión pero fue “descubierto” cuando – en una época más abierta a las producciones independientes y experimentales – se decidió comprar y producir su historia para “¿Quieres ser John Malkovich?”

Esa película cuenta de un hombre deprimido que descubre un piso misterioso de un edificio – un medio-piso que existe entre dos pisos oficiales. Tiene allí una puerta que permite al que entra ver el mundo desde la perspectiva del prestigioso actor John Malkovich. Después de unos minutos de ver el mundo así y “ser John Malkovich” la persona es arrojada a la tierra cerca de una autopista de Nueva Jersey.

Hoy en día Kaufman sigue trabajando, aunque las condiciones para producir películas como las suyas son cada vez más difíciles.

Dijo en una entrevista recién que, “No estoy creando un producto. No estoy fabricando un auto o una lata de frijoles. Estoy tratando de expresar algo…El hecho de que no haga películas con superhéroes o un thriller con espías no me parece un error. Este negocio ha sido reducido a la misma historia, contada otra vez y otra vez.”



©2009 Tim Peters/All rights reserved